La pintura al óleo, es una de las preferidas por los artistas desde hace siglos. Gracias a las características de esta pintura, como el acabado brillante que deja y la intensidad de sus colores, además de los materiales empleados para trabajarla, que permiten modularla con relativa facilidad, la convierten en una opción sobresaliente para la realización de cuadros. A lo largo del siguiente artículo, iremos viendo algunas de las mejores técnicas para su aplicación, así como atributos destacables de esta.
¿Qué es la pintura al óleo?
Antes de empezar a pintar al óleo es necesario saber que es una de las técnicas de pintura con un uso más extendido, pero como todo, tiene sus pros y sus contras.
Esencialmente, mezcla un pigmento que aporta el color con un aglutinante, es decir, un aceite como el de linaza, de almendra o de cártamo y un solvente, que facilita su aplicación.
Pros de pintar al óleo
La principal ventaja que se puede destacar en este tipo de pintura es que el tiempo de secado es mayor que en otras técnicas como las acuarelas, por lo que es más fácil para los artistas realizar modificaciones y trabajar en sus obras.
Los pigmentos, al mezclarse con el aceite, ofrecen una amplia gama de colores, que ayudan a trabajar aspectos como la profundidad, realizando combinaciones con otras tonalidades.
En cuanto a los efectos, es posible hacer que se vean con acabados más transparentes, brillantes, opacos o mates dependiendo de las cantidades que se utilicen para realizar las mezclas.
Además de todo esto, su textura y consistencia son similares desde que se comienza la obra hasta que se seca y se finaliza, por lo que el autor puede hacerse una idea de cuál será el resultado desde el primer momento. Esto, por ejemplo, no sucede con las acuarelas, que varían su apariencia una vez se secan.
Contras de pintar al óleo
Para algunos artistas que prefieren la utilización de bases secas, el secado lento de este tipo de técnica resulta ser un hándicap.
La facilidad para mezclar los óleos, que antes veíamos como algo positivo, puede convertirse en una desventaja cuando los artistas mezclan demasiados colores, ya que pueden hacer que las formas se vean difusas y las tonalidades lodosas.
Con el paso del tiempo, los óleos de linaza, los más utilizados, se vuelven amarillentos y se oscurecen por lo que, para conservar su estado original, deben ser tratados con algunas técnicas que no se encuentran al alcance de muchos artistas.
Incluso grandes pintores como Leonardo Da Vinci, en sus comienzos con este tipo de técnica sobre una superficie preparada como un fresco, han visto algunas de sus obras más famosas como la Mona Lisa o La Última Cena agrietadas con el transcurso de los años.
Pinceles para óleo
Antes de comenzar la pintura al óleo es necesario preparar todos los materiales. Los pinceles para óleo más empleados son los de mango largo, ya que permiten tener un ángulo de visión amplio y, por tanto, una mayor precisión.
Para pintar dibujos que requieran cuidar mucho los detalles o se lleven a cabo al aire libre, pueden utilizarse también pinceles de mango corto, aunque no son tan recomendables.
Dejando a un lado el tamaño del mango, es posible pintar a pinceladas con herramientas de pelo natural o sintético. En función de la rigidez de estos pequeños pelos, se obtendrá un resultado u otro.
¿Qué pintar al óleo?
Prácticamente, el único requisito que debe tener un lienzo para poder ser pintado al óleo es estar imprimado o sellado.
Es recomendable utilizar una superficie rígida en vez de flexible debido a que, con el paso del tiempo, las segundas pueden hacer que la pintura se agriete. No obstante, el óleo puede aplicarse en lienzo, madera, cartón, metal, vidrio o lámina acrílica.
Pintura al óleo paso a paso
Para tener un diseño exitoso, es necesario partir de un boceto exitoso. Generalmente, mediante el uso de un carboncillo, se realizan trazos finos que indican dónde deben colocarse las partes más oscuras para recrear las sombras en la obra.
Con el fin de lograr que se adhiera correctamente la pintura, se aplica una capa fina como base. Hasta que esta no se seque, no debe comenzarse el cuadro.
La regla de oro en la aplicación de la pintura al óleo es que nunca debe aplicarse una capa hasta que no se haya secado del todo la anterior. Además, las capas superiores deben ser ligeramente más aceitosas que las inferiores. El motivo de la segunda regla es evitar el resquebrajamiento de la pintura que comentábamos anteriormente.
Para iniciar una pintura al óleo resulta conveniente hacerse con una paleta, ya que no solo ayuda a mezclar los colores, sino que su diseño ergonómico facilita el proceso de creación. Además, son fáciles de limpiar, económicas y no interfieren en el color que se coloca sobre ellas.
Para finalizar, es recomendable llevar a cabo los detalles y retoques con un pincel fino y con el pigmento extraído directamente del tubo, sin diluir.
Empieza a pintar al óleo
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